Mi estimado amigo y hermano en Cristo

Doy gracias a Dios por tu vida y de las quienes te rodean porque fue solo por Él que has llegado tan lejos y no puedo decir que no te equivocaste en algunas cosas. Aún así Dios utilizó tus decisiones para darte una lección en cada consecuencia, así de esa manera puedo ver qué sigues creciendo en sabiduría y perseverando en conocimiento.

Me gustaría añadir mi relato sobre ti que, con temor a equivocarme, puedo imaginar que sea similar a alguno (aún no leo los testimonios o relatos) aún así quiero decirte que conocerte específicamente en ese momento y en ese lugar sin duda alguna fue de parte de Dios.

Aún recuerdo ese día, creo que era el 2do o 3er día de clases en el segundo semestre de la preparatoria, cuando pasé por tu lugar y miré un expositor de célula en la mesa y recuerdo que pregunté - “¿A qué iglesia vas?” - Y me respondiste - “A la iglesia apostólica de la…” - No terminaste la frase cuando te dije - “Sí, sí, pero que número?” - Te quedaste con cara de ¿🤓? Y solo me respondiste - “en la 41”.

Ahí comenzó nuestra amistad donde en todo momento nos inspiramos mutuamente y sin querer a ser mejores y marcar la diferencia en cada aspecto de nuestra vida, éramos y somos diferentes, y en cada amistad que hicimos en la preparatoria junto con la convivencia de cada quien con su círculo fuimos diferentes aún así hemos seguido estando juntos en amistad y para cualquier cosa que se nos presente.

Para mí ese fue mi evento cannon 😆 Y hasta ahora sigue estando en mi memoria. Y siendo sincero a mí se me olvidan muchas cosas pero puedo recordar conversaciones viejas y acordarme de uno que otro detalle, siempre y cuando hayan marcado mi vida.

Y hasta aquí mi reporte Joaquín.

Volvemos al estudio 🎤 XD

Como siempre mi hermano mi deseo es que Dios te bendiga y te siga usando. Aquí seguimos en contacto.

Atte. Un loco que dice ser tu hermano 😁